por Nuestra serie de visitas teatralizadas puso fin a las XI Jornadas Culturales y Gastronómicas Mundamortis en Monturque (Córdoba). Con gran afluencia de público, se desarrollaron en cinco pases, en esta ocasión, por la mañana.
En la hora y media que dura la visita, los asistentes iniciaron la ruta en el cementerio de San Rafael de la mano de la poetisa María Gallardo, que explicaba el camposanto mientras se escuchaban melodías de violín que hacían el ambiente más plácido. En diferentes espacios, iban apareciendo personajes que nos hablaron de sus vidas.
Alonso Moriana destacó la generosidad de todo un pueblo que se hizo cargo de su enterramiento al perecer a causa de unas terribles inundaciones.
Antonia sobrecogió al público con su historia desgarradora. Ella fue madre soltera y al dar a luz vio morir a su hijo a quien no pudo dar sepultura cristiana. Representó a muchas mujeres que pasaron por su angustiosa situación. Una pareja de nobles romanos nos trasportó a la época cuando el cementerio era el foro y se levantaba un templo donde se hacían ofrendas. Esta vez, el episodio recreaba la intención de pedir a los dioses que pararan una gran guerra que asolaría aquellas tierras. Era la hora de relevar de anfitriona. Doña Catalina La del Marqués fue la encargada de llevar al público a ver las Cisternas Romanas. A su salida, el mismísimo Rafael de Lara, descubridor de esta maravilla arquitectónica, habló de su vida.
Fue alcalde y a él se debe el nombre del cementerio que se halla por encima de este sorprendente enclave. Después, visitaron el Patio de los Ahorcados, donde puede apreciarse el desagüe de las cisternas que alimentaba las termas romanas. En este punto, la señorita Carmen Fernández recibió al grupo. Este pudo apreciar las increíbles vistas desde el Mirador de los Paseíllos. Camino de la iglesia, se encontraron con Juan, el marmolista. Él nos habló de su vida y de su singular oficio en un entrañable encuentro con nuestra anfitriona.
Y ya en la parroquia de San Mateo, Paula López contó su vida a los asistentes, dando fin a la visita. Ella fue la primera Hermana Mayor de la hermandad de Jesús Nazareno bajo cuyo mandato se terminó la capilla de la Virgen de la Soledad, que se encontraba en besamanos para esta excepcional ocasión.
Miembros de la Hermandad de la Virgen de la Soledad estuvieron en el templo parroquial acompañando a su imagen titular en el transcurso de las visitas.
Damos las gracias a las hermandades de la Virgen de la Soledad y de Jesús Nazareno y al Ayuntamiento de Monturque por seguir confiando en nosotros.
Felicitamos a todo el equipo de Eventos con Historia por su entrega y profesionalidad. Con este, son tres años de honrar y dar a conocer la memoria de personajes y vecinos de Monturque siempre desde el respeto en unas fechas que invitan a no perder la tradición hacia nuestros difuntos y a mantenerlos siempre vivos recordándolos. Es el sentido de Mundamortis.
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